viernes, 17 de junio de 2016

Reseña: Warcraft: El Primer Encuentro de Dos Mundos

Imagen propiedad de Universal Pictures, todos los derechos reservados.


Reseña: Warcraft: El Primer Encuentro de Dos Mundos

Género: Fantasía
Clasificación: B
Duración: 123 min.

Por Cristhian Ponce.

    Desde su aparición en el año 1994 Warcraft se convirtió en un fenómeno. El videojuego desarrollado por el estudio Blizzard  popularizo el género de estrategia en tiempo real trayendo un esquema de juego novedoso y divertido que rápidamente se colocó en el gusto de los video jugadores. Día a día se añaden nuevos fanáticos, esto debido a que el universo de la serie crece continuamente y el día de hoy el videojuego de la marca World of Warcraft es uno de los más jugados en el mundo.

    Mucho del encanto de la serie se debe a su mitología llena de magia y enfrentamientos épicos entre creaturas fantásticas. Toda su historia comienza narrándonos la guerra suscitada entre orcos y humanos, una epopeya inspirada en relatos como los de Tolkien o las historias fantásticas de la edad media. Con todos estos elementos en mente y la pronunciada popularidad de la serie, llega a la pantalla grande Warcraft: El Primer Encuentro de Dos Mundos. Tristemente no le hace justicia.

     El filme dirigido por Duncan Jones comienza por contarnos la historia de una pareja de orcos que esperan el nacimiento de su hijo, esto durante una inminente guerra en la que una magia oscura enemistara a orcos y humanos. La cinta se desploma con facilidad. Apenas entrados unos minutos de metraje la cinta parece extraviarse en un abismo, debido a que jamás son claras las motivaciones de los personajes y el universo no se comprende del todo. Solo aquellos que tengan un conocimiento previo con la serie podrán sentirse familiarizados, el resto del público tendrá que sacar sus propias conjeturas. Por otro lado, el ritmo se vuelve lento debido a su montaje carente de sentido estético y cuando llega la hora de los enfrentamientos estos resultan completamente intrascendentes. El hilo narrativo es tan pobre que es imposible sumergirnos en lo presentado en pantalla. Y las actuaciones no parecen ayudar demasiado, ya que el cast parece no tomarse las cosas muy enserio, salvo las actuación de Paula Patton quien interpreta a Garona, una mujer orco, que si bien no ofrece una actuación memorable, cuando menos no cae en la sobreactuación.

     Ni siquiera el despliegue de efectos especiales salva al filme. El abuso de CGI y su utilización parece digno de serie noventera, por lo mismo, hace que los efectos resulten risibles en ocasiones, aun a pesar del enorme esfuerzo invertido en la creación de los orcos que quizá sea lo mejor del filme, debido a que el diseño de personajes en general es respetado y luce bastante bien.

     Warcraft es una muestra más de lo que Hollywood puede hacerle a una franquicia solo cuando todo se invierte en la búsqueda de dinero y no en el amor al arte fílmico. Sin duda una adaptación de la que habrá que tomar nota: su cumulo de fallos evidencian una crisis creativa que trabaja al servicio de las grandes productoras.


Calificación: 3/10



martes, 14 de junio de 2016

Reseña: El Callejón de los Milagros

Propiedad de Alameda Films, todos los derechos reservados.

Reseña: El Callejón de los Milagros

Año: 1995
Género: Drama
Clasificación: R
Duración: 144 min.

Por Cristhian Ponce.

   Las ilusiones colman la existencia humana, como un recipiente que se llena gota a gota del cuál bebemos todo su líquido y que transpiramos con pudor, ellas hacen de nuestro vivir un imaginario que antojamos verdadero. Y no se trata de idealizar cosas alejadas de nuestro mundo, si no de aquello que hará de nuestra vida un lugar tranquilo, lo que necesitamos para amortiguar la dura realidad que nos ha tocado vivir. Quizá por eso verlas quebrajarse nos desmorona con facilidad, nos recuerda que seguimos viviendo en el mundo que siempre hemos habitado.

    El Callejón de los Milagros del director Jorge Fons nos lleva a ese barrio donde seres humanos viven contiguamente peripecias en su búsqueda por sanar el dolor de su existencia. Pero no hay que engañarnos. Los personajes no viven alejados de nuestra realidad.  Son aquellos que luchan día a día para poder vivir, quienes tienen un trabajo humilde y que viven entre la línea que divide a la pobreza y una vida más abundante.

    Vicente Leñero, que no se diga más, es una de las figuras literarias más importantes de México, adapta al contexto nacional la obra del escritor egipcio Naguib Mafhuz para traernos un guion excepcional lleno de personajes memorables y humanos, narrando sus historias de manera alterna. En el film vemos como Don Ru (Ernesto Gómez Cruz), quien es dueño de una cantina donde varios personajes van a divertirse, tiene que lidiar con sus problemas hogareños en su búsqueda de algo que le haga vivir nuevas emociones. Almita (Salma Hayek) una bella joven que busca iniciarse en el tortuoso camino del amor, y a Susanita (Margarita Sanz) la mujer dueña del lugar donde todas estas personas viven, y que a su vez espera ansiosa la llegada de un nuevo amor.

    Será por el cumulo de sus supersticiones ligadas a adivinación o las limpias realizadas por la madre de Alma a todos los vecinos, o quizá por el constante anhelo de una vida mejor en la que se ven inmersos la mayoría de los personajes. El Callejón de los Milagros más que un sitio en la Ciudad de México parece ser más bien un refugio mágico donde la realidad tarde o temprano alcanza a sus protagonistas. Y la realidad, sobra decirlo, dista mucho de ser un antídoto a la existencia.

      No importa en qué lugar del mundo estemos, ni el contexto en el que nos encontremos: el anhelo y la desilusión humanos son parte importante de nuestra perpetuidad. Es ahí donde se encuentran los milagros, en disfrutar y sufrir.


Calificación: 8.7/10



viernes, 10 de junio de 2016

Reseña: The Revenant (El Renacido)

Imagen propiedad de 20t Century Fox, todos los derechos reservados.

Reseña: The Revenant (El Renacido)

Género: Drama histórico.
Clasifiación: R
Duración: 153 min.

      ¿Con que energía volveríamos a la vida cuando se nos ha arrebatado hasta el aliento? Como seres humanos formulamos cuestionamientos para problemáticas que nosotros mismos hemos creado. Para ahondar y encontrar la solución hace falta emprender viajes extraordinarios que nos hagan abrir bien los ojos subyugando las heridas que aun cicatrizan, en la búsqueda por la paz interior.

      Con The Revenant, el director Alejandro Gonzalez Iñarritu nos entrega una visión oscura de un mundo desolado y abatido por la violencia en el contexto de los primeros años de los Estados Unidos, en donde la sobrevivencia de los habitantes se debe a la recolección de pieles de animales salvajes, por lo cual se emprenden expediciones en las que varios hombres colaboran. La paz de los mismos se ve amenazada por los constantes ataques de los indios sioux, quienes reclaman lo que les fue arrebatado de manera sangrienta. La cinta nos introduce inmediatamente a ese ambiente desolador en donde los humanos hacen lo que sea por sobrevivir, y en donde el dolor se esparce como la sangre en el agua.

Imagen propiedad de 20th Century Fox, todos los derechos reservados.

       Es ahí donde Hugh Glass (Leonardo DiCaprio) guía a un grupo de hombres por el camino de vuelta al campamento donde viven debido a que es el único que conoce la ruta de regreso. Glass viaja junto a su hijo Hawk (Forrest Goodluck), quien recibe constantes insultos derivados del desprecio hacia sus orígenes y rasgos indios. Durante el trayecto el guía sucumbe a los ataques de un oso grizzly, el cual lo deja sumamente moribundo. El grupo al que guiaba decide dejarlo con la única condición de que haya hombres que cuiden de él.  El joven Jim Bridger (Will Poulter) y John Fitzgerald (Tom Hardy) deciden cuidar de él, para después abandonarlo en la deplorable condición en la que este se encontraba. Lo anterior sirve como punto de partida para el doloroso viaje que Hugh Glass tendrá que emprender.

       Leonardo DiCaprio ofrece una actuación soberbia al reflejar todo el sentir de Glass con tan solo la gesticulación de su rostro, con solo ver su mirada podemos acompañarlo en la pena que le embarga. Tom Hardy no se queda atrás en la labor histriónica interpretando a un hombre tirano que ha perdido la sensibilidad. La cinta basa su lenguaje casi completamente en la orquestación de la espléndida fotografía de Emanuel Lubezki, quien nos muestra a luz natural la belleza de un mundo que se ve amenazado por la bestialidad del hombre. Sin duda es por ello que la cinta logra transmitir en cada toma una invitación a la reflexión introspectiva, un viaje espiritual en que somos llevados al compás de la música compuesta por Ryuichi Sakamoto y Alva Noto, la cual resalta el trayecto del protagonista.


        The Revenant es un filme poderoso que nos evidencia un mundo lleno de odio que no necesariamente se quedó encapsulado en una época pasada. Las heridas de Glass son aún más profundas que las provocadas por las garras de un oso, su dolor es sumamente interno. Ser parte de su viaje quizá nos ayude en nuestra búsqueda personal por una anhelada paz que nos fue arrebatada inmisericordemente. 

Califiación: 9.5/10


jueves, 9 de junio de 2016

Reseña: El Conjuro 2 (The Counjering 2)


Reseña: El Conjuro 2 (The Counjering 2)

Clasificación: B-15
Género: Terror
Duración: 134 min.

Por Cristhian Ponce.

         Cuando la cinta El Conjuro apareció en el año 2013 causó revuelo en la audiencia debido a que represento una propuesta que se aleja de los convencionalismos a los que la gran industria había acostumbrado al público, trayéndonos la historia de los esposos Ed y Lorraine Warren, quienes se ganan la vida resolviendo misterios paranormales. La magia (o debiéramos decir horror) de la primera película de la ahora serie se debe sin duda a un balance entre lo gráfico y lo psicológico, trayendo al género a un terreno comercial que cualquiera puede disfrutar y que además recordaba mucho el tono en el que muchas cintas de terror lograron su gran auge en el siglo pasado.

          De la mano del director James Wan, quien fungiera también como el director de la primera cinta, vemos a los Warren de vuelta en un nuevo caso paranormal. En esta ocasión, los esposos tendrán que resolver un caso en el que una familia en Inglaterra que ve amenazada su tranquilidad por la hostilidad de un ser los quiere echar fuera, a su vez que la pareja tendrá que lidiar con la sombra de uno de sus casos más famosos: el llamado terror de Amytiville.

        Los cambios respecto a la primera entrega son notorios, empezando por la paleta de colores que deja atrás los colores marrones de la primera entrega, ahora mostrándonos un tono más azulado y negro. El director hace lujo de gala de su buen manejo en el montaje trayéndonos planos secuencia y tomas aéreas que sin duda son su sello y le dan dinamismo a la cinta. La trama aunque se antoje más compleja resulta mucho más amigable, basando su argumento en simplemente al hecho de creer o no en lo sobrenatural.

         La cinta resulta un producto entretenido que va construyendo su atmósfera poco a poco y que de pronto se desploma para alejarse de su propósito principal. Y es que conforme el guion se esfuerza por mostrarnos los lazos humanos de los protagonistas se va perdiendo la atmósfera inicial, restándole credibilidad a la trama poco a poco. Los personajes parecen desenvolverse en películas diferentes, a veces en el drama y a veces en el terror, lo cual hace que se pierda la tensión que se había construido y que la trama se sienta alargada innecesariamente.

        La cinta deja atrás todas aquellas cosas que fascinaron al público en el año 2013 para recurrir a los clichés habituales del género, aquellos que solo se limitan a querer sorprender al público por medio de gritos y apariciones repentinas en pantalla que sin duda se olvidan fácilmente.

         En la balanza, El Conjuro 2 resulta un filme entretenido que no logra equiparar lo hecho por su antecesora, y que a pesar del esfuerzo no supera las altas expectativas generadas al apostar más a los sobresaltos que a los juegos mentales, pero que aun así se salva por la habilidad  de su director por mantener el espectáculo a flote, a pesar de que olvide que filma una cinta de terror en ocasiones.


Calificación: 6.5/10




viernes, 3 de junio de 2016

Reseña: Tortugas Ninja 2: Fuera de las Sombras (Teenage Mutant Ninja: Out of Shadows)

Imagen propiedad de Paramunt Pictures, todos los derechos reservados.

Reseña: Tortugas Ninja 2: Fuera de las Sombras (Teenage Mutant Ninja: Out of Shadows)

Género: Acción/Superhéroes
Clasificación: B
Duración: 112 min.

Por Cristhian Ponce.


       Las tortugas están de regreso. El cuarteto de ninja-reptiles vuelve con esta secuela, en la que se enfrentan a una nueva amenaza cuando el villano Shredder (Destructor en la versión doblada al español) escapa de prisión. En su escape, el villano obtiene una nueva sustancia que pondrá a prueba al utilizarla en dos criminales de poca monta llamados Beebop y Rocksteady, los cuales mutaran para convertirse en un jabalí y rinoceronte humanoides respectivamente. Por su parte las tortugas debaten si es tiempo de salir de las sombras y ser conocidos por el mundo.

        De esta manera, el argumento se desarrolla para ofrecernos una cinta que no se toma enserio más que en contadas ocasiones, lo cual resulta en un arma de dos filos, esto debido a que a pesar de que la cinta apuesta por la comicidad y esta suele rayar en lo caricaturesco en ocasiones. Por lo cual, hace que las situaciones que tratan de tener un tono más serio no profundicen demasiado. Otro punto importante a considerar son las actuaciones de Megan Fox como April O´Neal y Stephen Amell como Casey Jones, las cuales resultan por demás aflojeradas y acartonadas. El resto del elenco ofrece actuaciones un tanto exageradas que evidencian el tono del filme, por lo cual la actuación de Will Arnett se haga notar como un esfuerzo genuino de encarnar a su personaje, tristemente su personaje y sus situaciones no dan para mucho. Además, las situaciones no tienen una secuencia lógica que podamos creer y la cinta no respeta sus propias reglas y muchos de los acontecimientos suscitados en su predecesora no tienen un seguimiento apropiado, al parecer olvidaron en múltiples ocasiones que esta es una secuela.



       A pesar de estos tropiezos en la cinta, hay algo que la rescata en diversas ocasiones: el carisma de las tortugas. Y es que a pesar de que el desarrollo de los personajes secundarios deje mucho que desear, en esta ocasión se apuesta por un desarrollo en sus protagonistas y su deseo de ser aceptados por la sociedad. Y a pesar de que no se profundice mucho en ello, la esencia de sus personajes es respetada y los múltiples guiños a la serie ochentera harán que muchos la consideren su placer culpable del año. Cabe señalar que la película cuenta con un par de escenas de acción que resulta un deleite visual, como una bocanada de diversión que nos hacen olvidar sus fallos en múltiples ocasiones.

       Por ello la cinta no representa ningún referente y desde el principio su objetivo es claro: solo entretener. A final de cuenta, el producto entregado será medido por los fanáticos y nostálgicos y ellos le darán la última palabra a la película. Aun así, fuera de ese nicho, no habrá mucha felicidad para el resto del público. Cowabunga!



Calificación: 6/10


jueves, 2 de junio de 2016

Reseña: Mommy

Imagen propiedad de Seville, todos los derechos reservados.

Reseña: Mommy

Género: Drama
Clasificación: R
Duración: 140 min


        En un Canadá ficticio, en el año 2015, una nueva ley es aprobada. En dicha ley se estipula que los padres pueden decidir si se hacen cargo de sus hijos o no en casos específicos. Diane “Die”  Després, una mujer atractiva, es madre de Steve O´Connor Després. Die decide hacerse cargo de su hijo al retirarlo del centro de cuidado donde este se encontraba. El joven Steve, mismo que padece trastorno de déficit de atención con hiperactividad (ADHD por su abreviación en inglés) puede tener colapsos nerviosos que lo lleven a tomar acciones violentas, por lo que está de más decir que la vida de ambos cambiara radicalmente.

         Xavier Dolan, quien parece ser la sensación de Cannes después de tener contantes selecciones en dicho festival, nos trae esta cinta con la cual ganó el premio del jurado en el año 2014.  El estilo audiovisual del quebequense de 25 años de edad es muy particular.  En este film, Dolan retrata la relación entre una madre que tendrá que todo de sí para poder sacar avante a su hijo. Los personajes atraviesan por una travesía que va desde la catarsis, la diversión, la tranquilidad, la tristeza, la furia y la emotividad.


Imagen propiedad de Seville, todos los derechos reservados.

         Ya sea a través de la yuxtaposición de las situaciones cotidianas llevadas al rango de la inestabilidad o del ritmo aderezado por la selección musical particular de Dolan, la cual va en su mayoría de canciones pop, rock y electro bastante comerciales que articulan un estilo particular al filme. Así como las actuaciones compuestas por Anne Dorval (Die); Antoine Oliver Pilon (Steve) y de Suzanne Clément (quien intepreta a Kyle, una vecina con problemas de habla quien les acompaña en la historia) sustentan con fuerza lo sucedido en pantalla. Con todo ello se forma un conjunto en el cual podemos adentrarnos a un contexto donde  tomar rienda de nuestras responsabilidades puede llegar a ser una tarea que puede asustar, pero que nos enriquece conforme avanzamos en el trayecto.

          Un filme que explora una anhelada libertad interior y de la difícil tarea de una madre en una era donde nadie quiere tomar la rienda de su vida e irse solo por la vía fácil. Y es que todos de alguna manera buscamos atención, el hecho de que el joven Steve llegue al extremo con ello y la constante atención de su madre este ahí nos recuerda la importancia que tiene el amor de los seres cercanos.
   
           Pero Dolan no engaña a nadie: a veces la tarea no es tan sencilla. Y a pesar de los brillos de alegría al bailar y andar en patineta en las calles resultan fascinantes, la labor pesada puede llegar a pasar factura. La cuestión es: ¿Qué tanto estamos dispuestos a llevar la carga en nuestros hombros?, o en el peor de los casos ¿Nuestras acciones son una acción amorosa o una exhumación de las propias responsabilidades y culpas?


Calificación: 9/10

miércoles, 1 de junio de 2016

Reseña: La Tumba de las Luciérnagas (Hotaru no Haka)

Imagen propiedad de Studio Ghibli, todos los derechos reservados.

Reseña: La Tumba de las Luciérnagas (Hotaru no Haka)

Género: Animación/Drama
Clasificación: B
Duración: 88 min.

Por Cristhian Ponce.


     Hay que reconocerlo, Studio Ghibli es portador de una extraordinaria magia. Sin duda el estudio de animación japonés posee una habilidad extraordinaria para contar historias que nos llevan de lo fantástico a lo real y viceversa. Sus personajes y sus travesías reflejan una mirada particular del mundo que nos demuestra cosas que quizá pasen desapercibidas para muchos, que se han olvidado para otros.

     En esta cinta en particular, Isao Takahata -el director y escritor del film- nos presenta la historia de dos hermanos: la pequeña Satsuko y su hermano mayor Seita, quienes tienen que enfrentarse a la vida al perder su hogar durante los bombardeos sucedidos en Japón en pleno 1945, donde la Segunda Guerra Mundial se encontraba en su mero climax.


Imagen propiedad de Studio Ghibli, todos los derechos reservados.

      La cinta no adorna la realidad, presentándonos un contexto duro en donde la pérdida y la indiferencia son constantes. Sin embargo, los hermanos no pierden la esperanza, su amor mutuo se refleja y nos conmueve al ver la fortaleza de su espíritu luchar por mantenerse con vida. Dos niños que se maravillan constantemente de la belleza que aun le queda al mundo, aterrados cada vez que la alarma avisa de un nuevo bombardeo. Seita tendrá que tomar difíciles decisiones y acelerar su proceso a la adultez, siempre tratando de tomar la responsabilidad suya y la de su hermana, aun cuando cometa errores en el trayecto.

       El conjunto compuesto por la excelente música de Michio Mayima; una animación envolvente y un guion magnifico hacen de esta una cinta maravillosa. El retrato es tan impactante que nos olvidamos de estar viendo una cinta de animación. La conjugación de su ritmo que nos demuestra la belleza de la vida en contraposición con los horrores de la humanidad. Y es que resulta imposible que la hermandad de Satsuko y Seita no nos conmueva, porque somos parte de sus alegrías y de sus pesares.

       La cinta se cuela en nuestra mente, en nuestros intestinos, profundizando en el corazón, en nuestra alma. Y es que el ver a una sociedad que endurece su corazón hacía el dolor humano resulta sumamente difícil de ver. Nos cuesta aceptar que nos vemos reflejados en ello. Adultos que no quieren asumir la responsabilidad hacía con los niños. De ahí surge el extraordinario valor de la cinta: humanizándonos, recordándonos los dolores que la guerra puede traer, proyectando a la inestable sociedad en donde vivimos, haciéndonos una pregunta de frente: ¿Qué nos ha sucedido?

       Ojala tuviésemos palabras para contestar la pregunta de la pequeña Satsuko: ¿Por qué las luciérnagas mueren tan pronto? Desearíamos tener una respuesta sensata que le devolviera la esperanza cuando vemos que las únicas luces de su mundo se extinguen rápidamente. El cine trata de ello, de formular preguntas por más duras que sean, nuestro trabajo es hallar una respuesta.


Califiación: 10/10