domingo, 24 de abril de 2016

Reseña: ¡Salve, César! (Hail, Caesar!)


Imagen propiedad de Universal Pictures, todos los derechos reservados.




Reseña: ¡Salve, César! (Hail, Caesar!)


Clasificación: B
Duración: 106 min.


Por Cristhian Ponce

Es 1951. Algo sucede en Hollywood. Ese lugar enigmático donde cosas inimaginables pueden suceder. La gente vive preocupada por su imagen pública, los productores se preocupan por que sus productos lleguen en tiempo y forma. Todo es mercancía. Todo es una industria.

Los hermanos Joel y Ethan Coen están de vuelta en la silla del director, y como es costumbre, tienen algo importante que decir. En ¡Salve, Cesar! Nos cuenta la historia del director de Capitol Records, Eddie Mannix, quien se encarga de resolver todo tipo de problemas relacionados con la gente que trabaja en el lugar. Cuando el actor Baird Whitlock (George Clooney) es secuestrado, los planes del estudio se ven frustrados, lo que desata una serie de conflictos para Mannix. La cinta tiene un elenco estelar donde participan los ya mencionados Brolin y Clooney, al igual que Scarlett Johannson, Jonnah Hill, Channing Tatum, Tilda Swinton entre otros.






Imagen propiedad de Universal Pictures, todos los derechos reservados.
La película es una ácida crítica a la industria cinematográfica. Tanto un homenaje como una sátira de lo que fue la Época de Oro del cine hollywoodense. Situaciones que retratan momentos históricos o personalidades icónicas donde los Coen pueden elogiar y humillar por igual. Podemos ver cómo actores toman protagónicos solo para beneficiar las ventas de una película o como escritores tienen que prescindir de plasmar sus ideales para poder seguir en la industria. Sin duda el humor negro e inteligente, característico de los directores, se hace presente para mostrar el reflejo de lo que alguna vez fue, y de lo que tristemente aún permanece: Una industria que se olvida de la labor artística para solamente hacer productos.

La fotografía de Roger Deakins fusiona muy bien los formatos de cine de antaño con los actuales, lo que resulta un deleite que nos hace vivir de nueva cuenta una era que ya no existe más.

Aun con esto, hay varias cosas importantes por mencionar. Quizá la más importante de ellas sea que esta nueva cinta no es lo mejor que los hermanos Coen nos han entregado, por lo que si alguien espera ver algo como The Big Lebowski, Fargo, A Serious Man o incluso como No Country For Old Man, es importante decir que no verán algo similar. Sin duda la cinta tiene todo el estilo que les caracteriza, pero no alcanza la brillantez de las cintas anteriormente mencionadas.

Otro aspecto importante sería que muchos de los chistes o referencias que la película hace son a cintas de la época, por lo que si no se tiene un respaldo acerca de ello, mucho de lo ocurrido puede pasar desapercibido para algunos.


Imagen propiedad de Universal Pictures, todos los derechos reservados.


Aun así, la película representa una buena opción que nos hace reflexionar acerca de la labor fílmica, por lo que la intención de los Coen se ve bien reflejada.

Al ver esto en pantalla queda preguntarnos acerca de que tanto ha cambiado la industria, y sobre todo, a pesar de que nuestro deseo de sentirnos vivos sea ínfimo, hacernos la pregunta: ¿Qué tanta basura hemos consumido?



Calificación: 8/10

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